Los padres de familia no siempre reparan en las recomendaciones internacionales.Y una investigación lo confirmó. De acuerdo con la investigadora de la Clínica de Trastornos del Sueño de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Débora Yoaly Arana Lechuga, los niños mexicanos duermen dos horas menos en promedio que en otros países.La experta indicó que un estudio realizado por la Academia Americana de Sueño reveló que los niños de entre seis a 13 años requieren dormir 11 horas, sin embargo, se mostró que los participantes mexicanos duermen menos que en países como Australia, China, Estados Unidos, Suiza y Japón, consignó información de la agencia Notimex.“La investigación mostró que los niños mexicanos están restringidos entre dos y tres horas cada noche, esto quiere decir que duermen menos de lo que deberían. Esto va a repercutir de manera dramática, porque serán niños con problemas en su comportamiento”, advirtió.Asimismo, una investigación realizada por la Clínica de Trastornos del Sueño de la UAM observó que mientras los niños duermen menos, su índice de masa corporal es mayor, lo que podría explicar parte del fenómeno de la obesidad infantil en México.México es el país número uno en obesidad infantil y pese a todas las campañas y esfuerzos que se han realizado no ha disminuido la incidencia, cada vez hay más niños con sobrepeso”, dijo la especialista.“Todas las campañas contra la obesidad incluyen hacer ejercicio, mejorar la alimentación, pero no toman en cuenta el tema del sueño. No estamos prestando atención en cómo están durmiendo nuestros niños mexicanos con sobrepeso y obesidad”, agregó.Arana Lechuga comentó otro estudio publicado en la Revista Pedriatic que examinó las asociaciones entre la duración del sueño y los marcadores de riesgo de diabetes tipo 2 en niños de nueve y 10 años, donde demostró que mientras menos horas de sueño tuvieran los participantes, la probabilidad de mayor resistencia a insulina y glucosa era alta.La revista Current Sleep Medicine Reports publicó en 2016 que hasta el 40 por ciento de la población pediátrica ha reportado casos de insomnio, mientras que los adultos presentan este problema entre 35 y 50 por ciento.Sin embargo, revela que, a diferencia de los adultos, quienes presentan insomnio asociado a trastornos de ansiedad y depresión en niños el fenómeno se asocia a malos hábitos.La investigadora de la UAM apuntó que realizar actividades estimulantes, consumir sustancias bioquímicamente activas como el café, té verde, chocolate con leche, así como ver televisión, utilizar dispositivos electrónicos como celulares, tabletas o videojuegos antes de dormir, son prácticas inadecuadas que podrían condicionar el aumento del insomnio infantil.(Foto: Tomada de la agencia Notimex)Compartir