El servicio de venta de boletos Ticketmaster México pasó de un servicio de primera clase a un desastre denunciado por fraudes y miles de quejas de consumidores.

Hace ya varias décadas en que la base tecnológica, la capacidad instalada y la cantidad de personal que hicieron de Ticketmaster México un servicio a la altura del tipo de espectáculos, encuentros deportivos y shows que ofrecía, ahora deja mucho que desear, y conseguir una buena entrada puede ser decepcionante.

De acuerdo con fuentes internas de esta empresa vendedora de boletos citadas por el diario Reforma, su servicio está rebasado a nivel nacional y ya es común recibir quejas de usuarios por duplicidad o falsificación de entradas, así como largas filas y gran lentitud en los centros de atención al cliente, en los que ya es una constante no encontrar una respuesta satisfactoria a los conflictos que se denuncian.

Tenemos el triple de eventos en el año, en comparación con el 2019, y por la crisis que desató la pandemia, no hubo contratación nueva de personal. Es decir, si antes eran 10 clientes por un empleado, ahora pueden ser 30 o 50 y eso es insuficiente. El espectáculo, el deporte, explotaron el año que el sistema está reventado”, indicó a Reforma un ejecutivo que solicitó mantener su identidad en el anonimato.

IGNORANTES DE SU SISTEMA

Reforma corroboró estas situaciones en diferentes módulos, donde los empleados no conocen del todo el sistema que operan.

Al cliente no le importa si son 100 o un millón los que quieren comprar un boleto al instante. Lo que desea es resultado, pero toda página tiene su capacidad… se sigue trabajando con un sistema elemental en el que gana el que tiene más suerte, el mejor internet y la mejor capacidad de respuesta a promociones y mejor historial de ventas”, puntualizó un empresario que trabaja con la plataforma.

COMPETENCIA Y FUSIÓN

  • Ticketmaster México es junto con Súper Boletos y Boletia, de las emisoras de entradas para entretenimiento y deportes más grandes que operan en el país.
  • En 2010, Live Nation y Ticketmaster se fusionaron y controlan cerca del 70 por ciento de la industria de la música en vivo.

“Se supone que TicketFast, que es la mejor opción para comprar, ya que puedes imprimir boletos en tu casa, es la que se ha vuelto más complicada y si tus boletos no aparecen en la cuenta, debes ir a un centro de atención… haces fila, debes esperar un montón, y no siempre tienes éxito”, relató Fabián C. Casas, un usuario que tuvo mala suerte con sus boletos para la reciente edición del Corona Capital.

Y así como él, abundan quejas de usuarios de Twitter, Facebook, siendo el común denominador que no siempre funciona el sistema de impresión en casa, o que los puntos de atención al cliente suelen estar saturados de personas y piden muchos requisitos para la impresión del boleto.

“Entre más creces, más abarcas, pero te enfrentas a mayores problemas y si no mejoras tu capacidad y a tu equipo, la respuesta es deficiente. Esto está sucediendo. Al usuario le interesa que le resuelvan un problema en instantes, pero hay un tiempo de respuesta humano que no se toma en cuenta”, indicó a Reforma otro empleado de Ticketmaster.

SU “MODUS OPERANDI”

Cada vez son más las quejas contra Ticketmaster por los problemas que se enfrentan en su página para adquirir boletos.

  • Es una situación recurrente la duplicación o falsificación de entradas.
  • Es difícil comprar boletos en la plataforma o en el sistema de atención telefónica para grandes eventos o de figuras internacionales.
  • En los centros de atención al cliente se hacen colas hasta de cuatro horas tan sólo para recoger entradas.
    (Fotos: Tomadas del diario Reforma)
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