El creciente problema del suicido en México demanda una acción coordinada de todos los sectores de la sociedad como instituciones públicas y privadas, escuelas y hospitales y pre hospitalario, informó la Secretaría de Salud a la Cámara de Diputados.

Al responder un punto de acuerdo, la dependencia federal señaló que las estrategias para la prevención van más allá de los planes del sector salud, deben alcanzar también las áreas social, familiar y laboral, señaló un despacho de la agencia Notimex.

Indicó que, para ello, se requiere consolidar políticas públicas para atenderlo con una norma oficial e incluso, dentro de la Ley General de Salud.

Consideró que atender este problema necesita de un enfoque transversal, porque sólo “se prioriza la condición aguda, sin embargo, se necesitan programas de seguimiento para llevar a cabo una prevención efectiva”.

La opción más viable para identificar tempranamente estas conductas es, sin duda, el ámbito escolar, y los docentes son una población estratégica para recibir capacitación en la detección primaria del suicidio, para evitar su desarrollo, ya sea con lesiones o, en el peor de los casos, con la muerte.

Reconoció que en el ámbito escolar medio superior las tasas de suicidio y conductas se han incrementado de forma importante, más en mujeres que hombres adolescentes.

En el punto de acuerdo se le planteó crear e implementar una estrategia nacional de prevención del suicidio, que provea servicios de emergencias psicológicos y de prevención, así como atender a trabajadores con problemas de depresión, estrés y diversas complicaciones sociales.

Los legisladores expusieron que, de acuerdo con especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México y del sector salud, el suicidio es un problema de salud pública en el país, pues cada día, en promedio, 14 personas ponen fin a su vida.

Además, de los cinco mil suicidios registrados en 2015, el cuatro por ciento fueron consumados por individuos de entre 15 y 24 años; las entidades con el mayor número de casos son Campeche, Aguascalientes y Chihuahua.

El acceso a los medios para quitarse la vida es un factor importante de riesgo que puede determinar que el acto sea consumado o no, por lo que conocer los métodos más utilizados, permite elaborar estrategias de prevención, como la restricción a ellos.

En su respuesta, publicada en la Gaceta Parlamentaria, la Secretaría de Salud subrayó que el ámbito laboral también suele ser fuente de estrés continuo, por lo que es importante que en colaboración con el sector salud y las dependencias de protección laborales, se implementen programas permanentes.

Celebró que la Cámara de Diputados no sólo centre la responsabilidad de estas acciones en el sector salud federal y local, sino también en el escolar de los niveles básico, medio superior y superior, y en el laboral.

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