Al menos cuatro personas fueron detenidas por presuntos delitos relacionados con el accidente aéreo en el que murieron Martha Érika Alonso y Rafael Moreno Valle el 24 de diciembre de 2018.
La Fiscalía General de Puebla informó este viernes que los detenidos son tres hombres y una mujer identificados como José Antonio “N”, María Magdalena “N”, Ricardo “N” e Israel “N”.
Los presuntos responsables fueron aprehendidos en Puebla, Hidalgo, Estado de México y Ciudad de México, consignó el diario Reforma.
Previamente, la Fiscalía de la Ciudad de México había reportado la captura solamente de María “N” en la Colonia Santa María la Ribera, en la Alcaldía Cuauhtémoc.
Con motivo de la acción penal, la Fiscalía de Puebla dio cumplimiento a las cuatro órdenes de aprehensión por los delitos de homicidio a título de culpa, daño en propiedad ajena a título de culpa, y falsedad en declaraciones ante una autoridad”, detalló.
Los cuatro forman parte de la empresa Rotor Flight Services relacionadas con el funcionamiento de la aeronave.
“Será la autoridad judicial quien determine la situación jurídica de las cuatro personas, en tanto que la Fiscalía General del Estado de Puebla participará conforme a sus atribuciones en los procesos penales correspondientes”, puntualizó.
De acuerdo con las investigaciones llevadas a cabo, María “N”, en el año 2018, se desempeñaba como responsable del taller donde dicha aeronave recibía mantenimiento, mismo del que ella estaba a cargo.
La tarde del 24 de diciembre de 2018, la entonces gobernadora de Puebla, Martha Érika Alonso, y su esposo Rafael Moreno Valle murieron al desplomarse el Agusta A109S en el que viajaban sobre la comunidad de San Pedro Tlaltenango, tras salir de un helipuerto en la ciudad de Puebla con dirección a la Ciudad de México.
En el desplome también murieron un asistente de Moreno Valle y los dos pilotos de la aeronave, recordó la información de Reforma.
Martha Érika Alonso llevaba sólo 10 días como gobernadora.
SUPUESTAS FALLAS MECÁNICAS
En marzo de este año, Javier Jiménez Espriú, entonces secretario de Comunicaciones y Transportes, concluyó que una falla mecánica y deficiencias en el mantenimiento del helicóptero fueron las causas del accidente aéreo.
Según el informe, dos tornillos sueltos dañaron la tarjeta de control del estabilizador de vuelo, conocido como SAS (Stability Augmentation System) del helicóptero matrícula XA-BON, resultando en la pérdida de control del piloto.
Con esto y ninguna evidencia de explosivos, las autoridades federales descartaron un posible acto de sabotaje.
Durante la inspección por tomografía computarizada al otro actuador lineal (…) se encontró con una tomografía computarizada que tenía dentro del actuador dos tornillos, dos pequeños tornillos sueltos”, explicó Espriú.
(Fotos: Tomadas de la FiscalíaCDMX y AristeguiNoticias)