La obesidad infantil es un problema cada vez mayor. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud la obesidad y el sobrepeso en niños es la problemática más grave del siglo XXI.
La OMS estimó que el año pasado, más de 41 millones de niños menores de cinco años en el mundo eran obesos o tenían sobrepeso.
La obesidad en los niños suele ser una tendencia que se conserva en la edad adulta y con ello aumenta las probabilidades de padecer a edades más tempranas enfermedades no transmisibles como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.
La prestigiada Clínica Mayo indica que los niños obesos están por encima del peso normal para su edad y estatura.
CÓMO EVITARLA
La obesidad infantil puede ser evitada y prevenida para ello se recomienda:
- Buscar la manera de involucrar a los niños en la preparación de alimentos para que puedan ver qué es lo que se necesita.
- Evitar utilizar a los dulces como premio, esto hará que los niños no lo tomen como recompensa.
- En caso de que los niños lleven lonche a la escuela, este no deberá contener cereales de caja, jugos de caja, refrescos, galletas, gaseosas, panques u otro alimento dulce altamente procesado.
- Incluir en la alimentación frutas enteras, queso, yogur, nueces y proteína como huevo, pechuga de pollo o jamón de pavo
- Que el agua sea la principal fuente de hidratación.
- En caso de tener mascota, sacarla a pasear de manera constante es de vital importancia para mantener a los niños ocupados.
- Los niños deben tener limitados sus horarios de uso de dispositivos electrónicos.
- Limita la cantidad de veces que comen fuera de casa, en especial en restaurantes de comida rápida; cuando lo hagan, enseña a tu hijo a elegir las opciones saludables.
- Se recomienda que los niños obtengan el 55 por ciento de la energía de los carbohidratos, el 25 por ciento de las grasas y otro 25 por ciento de las proteínas.
LOS PADECIMIENTOS FUTUROS
Los niños obesos tienen más probabilidades de desarrollar una serie de problemas de salud en la edad adulta. Entre ellos:
- Cardiopatías
- Resistencia a la insulina (con frecuencia es un signo temprano de diabetes inminente)
- Trastornos osteomusculares (especialmente artrosis, una enfermedad degenerativa muy discapacitante que afecta las articulaciones)
- Algunos tipos de cáncer (endometrio, mama y colon)
- Los alimentos complementarios deben ser ricos en nutrientes y deben tomarse en cantidades adecuadas.
- A los 6 meses, deben introducirse en pequeñas cantidades, que aumentarán gradualmente a medida que el niño crezca.
- Los niños pequeños han de tener una alimentación variada que incluya alimentos como la carne, las aves, el pescado o los huevos, que deben tomar tan a menudo como sea posible.
(Foto: Tomada del diario Debate)