En Guanajuato vivir con diagnóstico de VIH ya no es sinónimo de muerte.
De acuerdo con un comunicado de la Secretaría de Salud, el tratamiento oportuno y seguimiento de control virológico al paciente le puede hacer vivir hasta los 80 años y morir de cualquier otra enfermedad menos de Sida.
Con un 92 por ciento, dijo el comunicado, la Secretaría de Salud del Estado se ha posicionado en el primer lugar nacional en control virológico de pacientes con el Virus de la Inmunodeficiencia Humana superando la media nacional que es del 85 por ciento.
Tener un control virológico significa además que a pesar de tener el virus en la sangre, este es indetectable tras los primeros seis meses de tratamiento; permitiendo un estilo de vida como cualquier otra persona no infectada.
Con motivo del Día Mundial de la Respuesta al V.I.H. 2017 “Mi Salud, mi derecho”, Silverio Ramírez Urbina recuerda con nostalgia y demás sentimientos encontrados el diagnóstico de ser portador del virus y que en aquel entonces era conocido como algo mortal.
“La esperanza de vida que me dieron fue de tres días, aún recuerdo que cuando regresé el doctor me dijo ¿y usted como sigue aquí?, eran otros tiempos, no habían los tratamientos que ahora existen”.
Silverio reconoce que hay acceso a los servicios de salud más especializados para los portadores, sin embargo, la discriminación sigue siendo un problema de actualidad a la que se enfrentan las personas, algo que ya debía cambiar.
Del año 1985 a la fecha en el estado de Guanajuato en todo el sistema de salud del estado se tiene un registro de 5 mil 195 pacientes con diagnóstico confirmatorio.
De los cuales actualmente la SSG por medio de tres centros especializados llamados Capasits (Irapuato, León y Celaya) atiende actualmente a 2 mil 319 pacientes.
Estos 2 mil 319 pacientes cuentan con Seguro Popular y son originarios de los 46 municipios.
De acuerdo a la cercanía con alguno de los tres CAPASITS es que reciben tratamiento.
De este total de casos 307 son nuevos pacientes de este año 2017, 243 de los cuales son portadores del virus, es decir asintomático y 64 pacientes diagnosticados en etapa sintomática de Sida.