Con su fortaleza y espíritu en alto muestran sus ganar de vivir. Indígenas wixákira de la tercera edad, tras caminar hasta cuatro horas desde sus comunidades y pasar por caminos asediados por narcotraficantes fueron vacunados contra el Covid-19 en una apartada región del este de México.

Un centenar de miembros de esta etnia, una de las más representativas del país por su cultura, recibieron el viernes el inmunizante chino CanSino Biologics, que requiere una única dosis.

La mayoría caminó unas cuatro horas hasta llegar al punto de vacunación en la comunidad Nueva Colonia, en el municipio de Mezquitic, Jalisco, al que se accede por senderos de tierra, consigna un reporte de la agencia AFP.

Las brigadas de salud arribaron al pueblo con el acompañamiento de militares de la Guardia Nacional para dar inicio a la campaña en esta zona enclavada en la Sierra Madre Occidental.

BAJO ASEDIO

Los habitantes de la región viven bajo el asedio de cárteles que se disputan el control de rutas para el tráfico de drogas en los límites de Jalisco, Zacatecas y Durango, denuncian autoridades y pobladores.

Para esas organizaciones, el área es clave porque ofrece “muchas rutas de escape” ante posibles operativos de las autoridades, señaló a la AFP una lugareña que pidió no revelar su nombre.

El cartel Jalisco Nueva Generación y el de Sinaloa suelen colocar retenes en las vías de acceso.

Te preguntan a dónde vas, de dónde vienes (…) El simple hecho del interrogatorio, de ver las armas, es algo muy fuerte”, sostuvo.

Según un balance oficial actualizado hasta el pasado 18 de marzo, la pandemia se había cobrado la vida de 2 mil 627 indígenas mexicanos, especialmente con edades comprendidas entre 60 y 74 años, entre los 17 mil 822 casos confirmados de coronavirus en esta comunidad.

ZONA AISLADA

Guillermo Islahuaca Álvarez, director de una seccional de la Secretaría de Salud de Jalisco, señaló a la AFP que, debido a los problemas de seguridad, como asaltos a personal médico como robo de automóviles, no había sido posible enviar personal de la salud a la zona desde febrero.

Los compañeros se reintegran después de dos meses de estar fuera de su unidad de adscripción”, dijo el funcionario, al precisar que durante ese lapso personal de salud perteneciente al pueblo wixárika atendió los casos de emergencia.

La primera en recibir la vacuna fue Lucía Mijares, de 69 años “Ya no quería tener miedo”, declaró a la AFP a través de una intérprete.

De acuerdo con el censo de 2020, hasta 7.3 millones de habitantes de México hablan alguna lengua indígena, principal criterio para determinar la identidad de ese sector de la población.

Una segunda jornada de inmunización fue programada para el próximo 26 de abril en comunidades donde se reporta la instalación de puntos de control por parte de narcotraficantes.

(Fotos: Tomadas de la agencia AFP)

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