Para los investigadores de las unidades del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del IPN en Irapuato, Guanajuato, solo hay dos opciones tras la decisión del presidente López Obrador y de los diputados federales de su partido de desaparecer los fideicomisos:

O salir del país o emplearse de maestros o para la plataforma Uber.

Así lo consigna información del diario Excélsior, en la que expertos coinciden que, de terminarse el financiamiento para sus investigaciones, no habrá quién se interese en sus conocimientos, por lo que deberán salir de México o bien, dedicarse a otra actividad, como dar clases en alguna escuela o manejar un Uber.

Entrevistada por el corresponsal del mencionado diario, Andrés Guardiola, la directora de la Unidad del Cinvestav en Irapuato, Gabriela Olmedo Álvarez, destacó que si algo le duele a la comunidad científica es que el mismo presidente tilde de “ladrones” a todos aquellos que han dedicado su vida al estudio.

“Me da una tristeza tremenda, porque, ¿sabes qué?, pienso que ni siquiera él —el presidente Andrés Manuel López Obrador— lo cree. Creo que es una manera de que la sociedad defienda esta acción, que diga la gente que si somos unos ladrones no tendríamos por qué tener ningún dinero o herramienta al alcance. Pero no hay evidencia. La gente no analiza ni pide pruebas o denuncias oficiales”, dijo la directora.

ESFUERZOS TITÁNICOS

Olmedo Álvarez reconoció que hay preocupación e incertidumbre entre los científicos a su cargo y han construido un website en el que se han colocado los proyectos que Cinvestav ha trabajado, así como todos sus detalles para que nadie los tilde de ladrones e inútiles, y que está claramente en www.cinvestav.me en donde se muestran 65 proyectos de vanguardia.

“Son todos los proyectos que están haciendo uso del fideicomiso del Cinvestav. No hay nada extraño. Este fideicomiso funciona para el trabajo de 120 investigadores y un investigador no trabaja solo, tiene alumnos de doctorado y de maestría y no se pueden quedar parados”.

Gabriela Olmedo lleva ya siete años dirigiendo el Cinvestav Irapuato y es doctora en microbiología y lleva 30 años trabajando en la institución, manteniendo incluso a su grupo de investigación original, añade la información de Excélsior.

ASÍ FUNCIONA

  • El Cinvestav depende de la SEP en su gasto corriente, pero son los proyectos de investigación los que dependen del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), por lo que los investigadores deben conseguir financiamientos.
  • “Cada investigador se las arregla y consigue su dinero, a veces tienen proyectos internacionales, nacionales, algunas investigaciones requieren mucho dinero, el área biológica es un poco más cara. Algunas investigaciones son más teóricas, como las de los matemáticos, y requieren de menos dinero, pero cada quien se organiza y consigue los recursos para investigar. El Cinvestav nos consigue el laboratorio y ya”, dijo Olmedo.
  • En los fideicomisos, las unidades del Cinvestav prestan servicios a instituciones y empresas.
  • Parte de ese dinero se queda con quienes trabajaron ese servicio y otra parte la absorbe el Cinvestav central y se queda en su fideicomiso.
  • Seis de los 109 fideicomisos por desaparecer pertenecen al Conacyt, y de esos, en Guanajuato se encuentran el Cinvestav y otros.

(Foto: Tomada de Excélsior)

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