El embajador de Estados Unidos en México expresa preocupación por la reforma judicial y su impacto en la relación comercial y la estabilidad económica. Durante una conferencia de prensa, Salazar enfatizó que cualquier reforma judicial debe garantizar el fortalecimiento del Poder Judicial y evitar que se vea influenciado por la corrupción política. 

La elección directa de jueces en estos tiempos, y la feroz política que acompañaría este proceso en 2025 y 2027, amenazan la histórica relación comercial que hemos construido, la cual depende de la confianza de los inversionistas en el marco legal de México”, afirmó.

Así mismo, subrayó que la elección directa podría facilitar la manipulación de jueces inexpertos por parte de cárteles y otros actores malintencionados, lo que podría socavar aún más la integridad del sistema judicial. Salazar, con amplia experiencia en el ámbito judicial estadounidense, destacó que la lucha contra la corrupción en México es crucial, pero opinó que la elección directa de jueces no resolvería este problema ni contribuiría al fortalecimiento del Poder Judicial.

También advirtió que este proceso podría debilitar los esfuerzos hacia la integración económica de América del Norte y generar “turbulencia” en los próximos años, complicando la gestión de litigios complejos, como las extradiciones y disputas comerciales. “Un Poder Judicial fortalecido en México debe contar con jueces capaces de gestionar estos desafíos”, insistió.

El diplomático señaló que la propuesta actual de reforma judicial elimina requisitos esenciales, como los años de experiencia necesarios para servir en todos los niveles del Poder Judicial, lo cual podría comprometer la calidad del sistema legal. 

Ken Salazar considera de suma importancia de mantener la certidumbre jurídica para las inversiones, especialmente en un contexto donde las elecciones directas podrían desestabilizar el marco legal. “No le dará certidumbre a nadie, ni al gobierno de México, ni al de Estados Unidos, ni a las agencias que quieren invertir”, advirtió.


Impacto en inversiones y el T-MEC

El embajador incluso sugirió que, de aprobarse la reforma, podrían surgir controversias en el marco del T-MEC, lo que podría complicar las relaciones comerciales entre México y Estados Unidos. “Va a haber litigios, muchas preguntas, y no sé cómo impactará en la relación con Estados Unidos si se percibe un marco legal inestable en México”, comentó.

Finalmente, Salazar subrayó que el Congreso debe revisar y entender las posibles consecuencias de la reforma judicial, especialmente en relación con la desaparición de órganos autónomos, sobre los cuales también expresó preocupación.

Con estas declaraciones, Ken Salazar reafirma la postura de Estados Unidos de respeto hacia la soberanía de México, pero también la necesidad de un marco jurídico sólido y confiable para asegurar la estabilidad económica y comercial entre ambas naciones.

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