Especialistas en nutrición y medicina del sueño advierten que, aunque el magnesio es esencial para diversas funciones del organismo, su suplementación debe ser evaluada con precaución y bajo supervisión médica. El magnesio participa en más de 300 procesos bioquímicos del cuerpo, incluidos los que regulan la función nerviosa y muscular. Por esta razón, se le asocia con la relajación y la mejora del sueño. Estudios indican que este mineral puede influir en el sistema GABA, un neurotransmisor que ayuda a disminuir la excitación neuronal y los niveles de cortisol, lo que favorece un estado de calma. Sin embargo, los especialistas aclaran que los datos disponibles son limitados y que aún no existe suficiente evidencia clínica para confirmar que los suplementos de magnesio mejoren de manera directa el insomnio o la calidad del descanso. Los efectos observados suelen presentarse en personas con deficiencia previa del mineral, no en quienes mantienen niveles adecuados. TIPOS DE MAGNESIO Y LAS PRECAUCIONES En el mercado existen diversas presentaciones —como citrato, bisglicinato u óxido— que varían en absorción y tolerancia. Los expertos recomiendan revisar siempre el contenido de magnesio elemental y consultar con un médico antes de iniciar cualquier suplementación. El citrato de magnesio suele tener mejor absorción. El bisglicinato puede resultar más tolerable para algunas personas. La dosis diaria recomendada ronda los 400 mg de magnesio elemental, considerando el aporte alimentario. Consumirlo en exceso puede provocar efectos secundarios como diarrea, náuseas o alteraciones en el ritmo cardíaco, especialmente en personas con problemas renales o cardiovasculares. DIETA LA MEJOR FUENTE Los especialistas coinciden en que la mejor forma de mantener niveles adecuados de magnesio es a través de la alimentación. Verduras de hoja verde, legumbres, nueces, granos enteros y pescados como el salmón aportan cantidades suficientes para cubrir las necesidades diarias sin recurrir a suplementos. Una dieta equilibrada, similar al patrón mediterráneo, suele garantizar el aporte necesario de este mineral. En casos de insomnio persistente o fatiga, los expertos recomiendan realizar estudios clínicos antes de iniciar cualquier suplementación por cuenta propia. En conclusión, aunque el magnesio cumple funciones esenciales para el sistema nervioso y muscular, la ciencia aún no confirma que su consumo extra sea una solución garantizada para dormir mejor. Su efectividad depende del estado nutricional previo y de la orientación médica personalizada. (Texto y fotos: Tomados de Debate.com.mx) Compartir Navegación de entradas Fortalecen campaña para la verificación vehicular Dejar de fumar, una estrategia contra la demencia