🔊 Escuchar esto Los efectos del consumo excesivo de alcohol en nuestro cerebro pueden persistir y afectar la función cognitiva de las personas hasta un día después, aun cuando el químico haya salido del torrente sanguíneo, muestra una nueva investigación.Todos sabemos que no debemos beber alcohol y conducir, pero ¿qué hay de saltar al volante la mañana siguiente después de haber estado consumiendo vino o cerveza?, se preguntó un equipo de investigadores británicos que decidió llevar a cabo un metaanálisis para encontrar la respuesta.[read more=”Leer más” less=”Leer menos”] 🔊 Nota completa De acuerdo con información de Notimex, el consenso más reciente define la resaca como los síntomas mentales y físicos experimentados el día después de un único episodio de consumo excesivo de bebidas alcohólicas.Sin embargo, para ampliar el conocimiento de esto, los investigadores evaluaron y estimaron el tamaño de los efectos en la cognición.Durante la investigación, los científicos analizaron datos de 19 estudios previos, que involucraron a mil 163 personas, los cuales evaluaron las capacidades de pensamiento de cada una de ellas el día después de haber bebido mucho, cuando su nivel de alcohol en la sangre era inferior al 0.02 por ciento.Algunos análisis se realizaron en laboratorio, debido a que los investigadores dieron a las personas cantidades precisas de alcohol antes de evaluar sus habilidades de pensamiento; mientras otros estudios fueron “naturalistas”, es decir los participantes fueron al laboratorio tras una noche típica de consumo social.La revisión sistemática de los resultados sugirió que la atención sostenida y las habilidades para conducir se deterioraron durante la resaca, además se observaron resultados mixtos para habilidades psicomotoras, memoria a corto y largo plazo, y atención dividida, afirman los investigadores.El metaanálisis, publicado en la revista especializada Addiction, sugiere que las resacas tras “una noche de copas” involucran el deterioro de las funciones cognitivas, incluida la memoria, la atención, la coordinación y el desempeño de tareas cotidianas como conducir un vehículo.“Nuestros hallazgos demuestran que una resaca puede tener consecuencias graves para la realización de actividades cotidianas y de habilidades en el trabajo como la concentración y la memoria”, precisa Sally Adams, profesora asistente en el Departamento de Psicología del La Universidad de Bath, en Reino Unido.Es bien sabido que beber alcohol puede perjudicar temporalmente el pensamiento y la coordinación mientras una persona está intoxicada, pero la nueva investigación muestra que también debemos tener cuidado con la resaca.“Aunque muchas personas piensan que está bien conducir la mañana después de una noche de beber, es posible que aún estemos incapacitados al día siguiente, incluso después de que el alcohol haya abandonado nuestro sistema”, asegura Adams, autora principal del estudio.[/read]Compartir