El enfrentamiento escaló y ahora los representantes de la cuarta transformación (4T) solo tienen un objetivo: destituir a la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña.

La ofensiva está encabezada por la ministra Yasmín Esquivel en medio de la discusión sobre la reforma al Poder Judicial que impulsa López Obrador.

Esquivel, afín a la 4T, pidió en sesión privada del pleno de la Suprema Corte la renuncia de la presidenta Norma Piña.

La polémica ministra, acusada de plagio en sus trabajos académicos, fundamentó su propuesta en que Piña no ha podido tener una interlocución adecuada con los otros dos Poderes de la Unión, el Ejecutivo y el Legislativo.

Señala que, para evitar una reforma judicial radical, debe hacerse a un lado para que haya otro interlocutor en las negociaciones parlamentarias.

RUTA DE CHOQUE

Apenas el pasado jueves, los 11 ministros de la Corte acudieron a San Lázaro a formular sus planteamientos sobre la reforma al Poder Judicial que debe dictaminar la 65 Legislatura, e intervinieron sin cortapisas, recordó el diario Reforma.

La intervención de Esquivel en la sesión privada de la Corte no fue secundada por otros ministros, pero tensó las de por sí complejas relaciones en la Corte, añadió Reforma.

Solo una ministra presente pidió dejar las “disputas palaciegas”.

Para destituir a Norma Piña, se requieren al menos 8 votos de ministros de la Corte. La petición de Esquivel es que Piña dimita sin necesidad de votar su destitución.

Cuando Norma Piña fue electa en enero de 2023, el voto de Esquivel en su favor fue decisivo para que llegara a la presidencia de la Corte. Pero ya le pidió renunciar.

(Fotos: Tomadas de Reforma y López Dóriga)

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