Sobrevivió a 36 quimioterapias, pero no a la violencia de su ex pareja. La enfermera Yolotzin Guadalupe López, encontrada sin vida esta semana en el municipio de Ecatepec, Estado de México, tuvo una vida de desafíos con apenas 29 años de edad.
Un recuento de la vida de un caso más de feminicidio en el país hecho por el diario Reforma indica que Yolotzin enfrentó dos batallas: una contra el cáncer y otra contra la violencia que ejercía su pareja sobre ella.
Y fue esta última la que le quitó la vida.
Yolotzin Guadalupe fue diagnosticada con cáncer de mama en 2015, cuando tenía apenas 22 años, contó su madre María Guadalupe al diario Reforma.
El proceso la llevó a hacerle frente a 36 quimioterapias, 38 radioterapias y una cirugía.
Ella me dijo: ‘yo tengo un hijo, el cual necesita una madre, con seno, sin seno, que sea guerrera para estar cerca de él’, y decidió hacerse cirugía bilateral”, explicó María Guadalupe.
ENFERMERA POR CONVICCIÓN
Fue durante su recuperación cuando optó por dedicarse a la enfermería y que consiguió una oferta de trabajo en uno de los consultorios de medicina alternativa a los que acudía.
Sin embargo, Yolotzin Guadalupe fue hallada sin vida el martes en Ecatepec, tras permanecer desaparecida desde el 30 de noviembre.
Su pareja, a quien anteriormente había denunciado por agresiones físicas, confesó haberla asfixiado y haber quemado su cuerpo.
OMISIÓN IMPERDONABLE
Los familiares de la víctima señalaron que no consiguieron que las autoridades investigaran la ausencia de Yolotzin.
Los agentes del Ministerio Público a los que acudió su madre no brindaron ningún tipo de apoyo durante esos días. Tampoco reportaron avances en la investigación.
Nunca me ayudaron en nada, en nada, toda la investigación la hice yo y ni aún así, no me brindaron el apoyo y la ayuda”, relató la madre.
“Hasta ahora que encuentran muerta a mi hija, entonces, ahora sí, ya son amables”, lamentó.
FUE OPACÁNDOSE
Jesús, pareja de Yolotzin, fue detenido como responsable del feminicidio. De acuerdo con la madre de la víctima, la relación sentimental que mantenía su hija se veía reflejada de manera negativa en el ánimo de la joven.
Mi hija fue opacándose, mi hija es una persona alegre, para nosotros era la alegría de la fiesta, organizaba, bailaba, esa era mi hija”, relató.
Incluso, el 5 de junio, Yolotzin había interpuesto una denuncia en el Ministerio Público de San Agustín, Ecatepec, por agresiones físicas en contra de Jesús. Ahí, los funcionarios le aseguraron que el hombre ya tenía otras dos denuncias por violencia, pero que no había sido detenido por tener algunas influencias.
(Fotos: Tomadas del diario Reforma e Infobae)