La calma regresó a Cancún, Quintana Roo, y a su zona hotelera. El polo turístico por excelencia de México, no sucumbió a los estragos del huracán Delta, que impactó las primeras horas del miércoles la Península de Yucatán.

Al mediodía de este jueves habitantes y turistas paseaban por las calles de la concurrida zona, observando los daños menores, como árboles caídos, que ha dejado Delta a su paso, reportó el portal electrónico Infobae.

Lo que se esperaba como el fenómeno meteorológico más potente de los últimos 15 años acabó, afortunadamente, en un huracán de categoría 2, cuyas mayores consecuencias fueron cientos de árboles caídos, postes de luz dañados, cortes de energía eléctrica y algunos encharcamientos”, reportó el gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González.

NOS DESPEINÓ

El paso del huracán Delta no dejó víctimas mortales ni heridos, según el saldo oficial. Las actividades tanto en el estado como Yucatán ya habían sido reanudadas.

Esto nada más nos ‘despeinó’. Ahora lo qué hay que hacer es limpiar, barrer, recoger árboles y reparar los materiales rotos. Esto no significa que vamos a cerrar el destino, para nada. Cancún sigue de pie”, afirmó a la agencia Efe, Roberto Cintrón, director de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres.

El pronóstico es compartido tanto por autoridades, turistas y residentes de la entidad: “nos salvamos”.

Los árboles caídos de la zona hotelera de Cancún se han convertido en una suerte de atractivo turístico.

Decenas de viajeros y pobladores locales pasean por el Boulevard Kukulkán, tomando fotos de árboles y postes dañados, así como de embarcaciones pequeñas sumergidas.

(Fotos: Tomadas de la agencia Efe)

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