En la Tierra, un día solar, el tiempo que tarda el Sol en volver al mismo lugar del cielo que el día anterior, dura 24 horas.Y esto es así desde tiempos inmemoriales, en los que hemos seguido la pista del Sol, la Luna y sus periodos siderales y sinódicos.En este sentido, es entendible que muchos creamos, y hayamos llegado a dar por sentado, que la mecánica orbital que rige el sistema Tierra-Luna siempre ha sido la misma, dice un artículo de DW Español.No obstante, resulta que los días de la Tierra se alargan lentamente, gracias sobre todo a la Luna, que en la antigüedad orbitaba mucho más cerca de la Tierra, por lo que el día medio era mucho más corto que hoy.JORNADAS CORTASAsí, según un estudio realizado por investigadores en China y Alemania, el día medio duraba 19 horas durante mil millones de años en la Época Proterozoica, un periodo geológico del Precámbrico que abarcó desde hace 2 mil 500 millones de años hasta hace 541 millones de años.Pero eso no es todo. Si usted se acaba de enterar que los días en la Tierra se han alargado a lo largo de la historia, seguramente intuirá que este alargamiento es constante y uniforme.Sin embargo, parece que este es un proceso mucho menos uniforme de lo que se había imaginado, ya que la elongación se ha detenido al menos una vez, según los resultados del nuevo estudio.TIEMPO DETENIDOEn concreto, la duración de un día en la Tierra, de acuerdo con el estudio, permaneció constante durante un largo periodo, de unos mil millones de años.En otras palabras, es posible que este proceso se detuvo durante este tiempo por completo, lo que pudo deberse a cambios en la atmósfera terrestre.La nueva investigación postula que este periodo de poca actividad, en la que la actividad tectónica se calmó.Además, los procesos geoquímicos rezumaron y la evolución de la vida en sus formas más simples no hizo gran cosa –denominado los “mil millones aburridos”–, coincidió con una época en la que el planeta Tierra estaba suspendido en un estado estable de rotación constante, como un resultado de un delicado equilibrio, manteniéndose en las 19 horas por día.“Con el tiempo, la Luna ha robado la energía de rotación de la Tierra para impulsarla a una órbita superior, más alejada de la Tierra”, explica el profesor Ross Mitchell, geofísico de la Academia China de Ciencias y autor del estudio titulado “Mid-Proterozoic day length stalled by tidal resonance” en Nature Geoscience.Como consecuencia del movimiento de la Luna hacia el exterior, la rotación de la Tierra se ralentiza y nuestros días soleados se alargan ligeramente, hasta las 24 horas diarias, y sumando.Numerosas investigaciones han estudiado cómo los días de nuestro planeta se alargan lentamente, a razón de 0.000015 segundos por año, según informa Science Alert.(Fotos: Tomadas de DW Español)Compartir