Tras el intento de portazo en la Secretaría de Gobernación, la presidenta Claudia Sheinbaum acusó que un pequeño grupo de maestros quiere provocar que autoridades federales repriman la movilización magisterial en la Ciudad de México.

En su mañanera, rechazó los actos violentos ocurridos a las afueras del edificio de Bucareli, a donde integrantes de la CETEG quisieron irrumpir mientras se desarrollaban negociaciones de la CNTE con el Gobierno federal.

Señaló que los manifestantes que aventaron piedras, rompieron vidrios y vandalizaron un vehículo oficial buscaron una reacción represiva del Estado, consignó Reforma.

Sin embargo, reiteró que la Administración federal no cederá a provocaciones y volvió a rechazar un diálogo directo.

ANTECEDENTES DE PROVOCACIÓN

Recordó que el año pasado, previo a las elecciones presidenciales, también hubo un plantón de la CNTE en el Zócalo y previamente se dio un evento similar de violencia en los accesos de Palacio Nacional que igual quiso provocar la represión.

“Incluso cuando fue el cierre de campaña nuestro aquí en el Zócalo, pues había una parte del Zócalo que estaba ocupada por los maestros, previo a ello, si ustedes se acuerdan, habían tratado de entrar aquí a Palacio, inclusive aventaron, piedras también”, dijo.

La mandataria llamó a que el resto del magisterio disidente, que lleva tres semanas de paro nacional y con un plantón en el Zócalo, se deslinde del intento de portazo o, de lo contrario, estarían validándolo.

Sheinbaum cuestionó el enfrentamiento en inmediaciones de la sede de Segob, cuando ya estaba una mesa de diálogo en curso entre líderes de la CNTE con la SEP y la Segob.

(Fotos: Tomadas de Reforma)

Compartir