Es conocido que la lactancia materna entrega una serie de beneficios para la salud, tanto como para la madre como para el bebé.

La leche materna contiene varios anticuerpos que protegen ante posibles infecciones al sistema inmunitario del recién nacido.

Y las madres que amamantan tienen menos riesgo de padecer cáncer de mama o de ovarios y enfermedades metabólicas, como la diabetes.

Recientemente, investigadores del Centro de Investigación sobre Nutrición Humana y Envejecimiento (HNRCA, en inglés) de la Universidad Tufts de Massachusetts han descubierto una relación entre una molécula de azúcar contenida en la leche materna y el desarrollo cerebral infantil.

ESTUDIOS EN MÉXICO

En concreto, el estudio publicado por la revista Proceedings of the National Academy of Sciences destaca un micronutriente llamado mio-inositol que está presente en la leche materna durante los primeros meses de lactancia, justo en la fase en que se forman las conexiones neuronales del cerebro de un lactante.

Los investigadores examinaron muestras de leche materna recogidas de madres sanas en Ciudad de México, Cincinnati y Shanghái.

En las muestras se observó que la concentración de mio-inositol variaba en función del origen étnico y social de las madres.

La formación y el perfeccionamiento de la conectividad cerebral desde el nacimiento están guiados por fuerzas genéticas y ambientales, así como por las experiencias humanas”, afirmó Thomas Biederer, autor principal del estudio.

El impacto de estos factores fue “especialmente importante en dos etapas de la vida: durante la infancia, y más adelante, a medida que se envejece y se pierden gradualmente las sinapsis”, añadió.

PASA MICRONUTRIENTES

El estudio sugiere que la dieta y la nutrición de las madres desempeñan un papel crucial en el desarrollo de los lactantes y los niños pequeños.

La llamada barrera hematoencefálica es más permeable que en los adultos. Eso significa que los micronutrientes de los alimentos pueden traspasarse más fácilmente al cerebro de los más jóvenes.

Como neurocientífico, me intriga lo profundos que son los efectos de los micronutrientes en el cerebro”, señaló Biederer.

La molécula de azúcar mio-inositol también se encuentra en algunos cereales, judías, salvado y melones.

(Foto: Tomada de DW Español)

Compartir