Un grupo de normalistas de Ayotzinapa derribó una de las puertas laterales de Palacio Nacional mientras el presidente López Obrador ofrecía su conferencia mañanera. Escudados con un vehículo de la CFE, los encapuchados provocaron daños en la puerta de madera ubicada en la calle Moneda, consignó el diario Reforma.

Elementos del Ejército y de seguridad de la Secretaría de Hacienda intentaron impedir la entrada de los manifestantes, incluso lanzando algunos gases.

Simultáneamente, el personal de Presidencia cerró las rejas de acceso al Salón Tesorería, donde se encontraba el mandatario.

En el momento de los hechos, López Obrador estaba siendo cuestionado sobre las exigencias de los padres y las protestas de los normalistas. En respuesta, declaró que serían recibidos por funcionarios de su administración.

SON PROVOCACIÓN

El tabasqueño también señaló que las movilizaciones de los últimos días, que han incluido cohetones y hasta el robo de vehículos para provocar daños en instalaciones oficiales, son una provocación y sugirió que algunas organizaciones tienen un carácter político electoral.

Los gases utilizados por el personal de seguridad de Palacio Nacional incluso alcanzaron parcialmente el salón donde se desarrollaba la conferencia.

López Obrador también acusó a Emilio Álvarez Icaza, ex titular de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), y a “grupos conservadores de derecha” de manipular a los padres de los normalistas y de buscar un daño político a su gobierno.

“Decir nada más a los padres que estamos dedicados, avanzando en la investigación, pero lo que sucede es que ellos están siendo manipulados por el grupo que encabeza Álvarez Icaza, la CIDH de la OEA, grupos conservadores de derecha apoyados por Gobiernos extranjeros que lo que quieren es hacernos daño, políticamente hablando”, dijo.

(Fotos: Tomadas del diario Reforma)

Compartir