La candidata presidencial opositora Xóchitl Gálvez se propone fortalecer al Servicio Exterior Mexicano y no poner cuates en las embajadas, en caso de ganar la elección el 2 de junio.En encuentro con la comunidad de la Universidad Iberoamericana, en la Ciudad de México, la candidata aseguró que la política exterior de su proyecto de país contempla no relacionarse con gobiernos autoritarios que violan derechos humanos.Frente a estudiantes, profesores, egresados y personal administrativo de esta casa de estudios, la hidalguense lamentó la persecución que viven los Jesuitas en Nicaragua y criticó las condiciones de autoritarismo en Cuba y Venezuela.CONDENA AL CASO ECUADOR“Condeno lo que pasó en Ecuador, más allá de los dimes y diretes que hubo previamente. A lo mejor no comparto la manera. Las embajadas en mi gobierno no van a ser cuevas de delincuentes”, dijo.“Yo no le daría asilo a alguien que está acusado en el caso Odebrecht, por ejemplo. Yo, como presidenta (pido), que se someta a la justicia de su país, si estamos atacando la corrupción y, en ese sentido, más allá de la decisión que tomó México, es lamentable la violación a nuestra embajada y todos los mexicanos”, dijo entre aplausos de los asistentes que acudieron al auditorio José Sánchez Villaseñor.EMBAJADORES DE VERGÜENZAExplicó que para fortalecer el Servicio Exterior Mexicano lo primero que hará es dejar de poner a “cuates” como embajadores.“Hay embajadores que son de verdad vergüenza, que no tienen ni las habilidades ni las capacidades”, criticó. En otro tema, comentó que uno de sus planes para fortalecer el sistema público educativo es entregar una Beca Universal, desde preescolar hasta preparatoria, para que todos los niños, adolescentes y jóvenes mexicanos puedan estudiar en escuelas públicas o privadas.Agregó que también proyecta un esquema para jóvenes que viven en zonas marginadas y quieran ingresar a una universidad.Compartir Navegación de entradasHasta 70% de las aguas subterráneas están contaminadas El cometa Diablo es visible en varios puntos del planeta