Subir escaleras, una acción cotidiana al alcance de todos, se perfila como un ejercicio con múltiples beneficios para la salud física y mental. Investigaciones recientes destacan que esta actividad simple, sin necesidad de equipo ni gimnasio, puede reducir el riesgo cardiovascular, mejorar la función cognitiva y fortalecer el sistema musculoesquelético. Durante la Conferencia de Cardiología Preventiva 2024 de la Sociedad Europea de Cardiología, especialistas presentaron evidencia de que subir escaleras eleva más la frecuencia cardíaca y el consumo de oxígeno que caminar a paso rápido. Esta exigencia convierte el gesto en un eficaz entrenamiento cardiovascular. La acción de subir escaleras implica una contracción muscular concéntrica, mientras que al bajarlas se activa la contracción excéntrica. Este doble estímulo fortalece piernas, glúteos y core, mejora el equilibrio y favorece la ganancia de masa muscular, incluso después de finalizar la actividad. IMPACTO EN EL CEREBRO Además de sus efectos físicos, subir escaleras también impacta positivamente en el cerebro. Estudios del psicólogo Andreas Stenling, de la Universidad de Umeå (Suecia), muestran mejoras en la flexibilidad mental y la capacidad de concentración tras realizar esta actividad. En adultos jóvenes, se observaron beneficios inmediatos en tareas cognitivas, mayor energía y mejor estado de ánimo. Incluso descender las escaleras puede estimular la creatividad, según una investigación de la Universidad de Yamaguchi, en Japón. Aunque aún se estudian los mecanismos involucrados, se estima que el aumento del flujo sanguíneo cerebral y la liberación de BDNF (factor neurotrófico derivado del cerebro) son clave en estos efectos. SUBIR COMO “SNACK” Una de las grandes ventajas de esta actividad es su accesibilidad. Basta con elegir las escaleras en lugar del elevador. La cardióloga Alexis Marcotte-Chenard, de la Universidad de Columbia Británica, destaca que cualquier persona puede adaptar el ritmo de subida a su nivel físico, lo que hace de esta una opción inclusiva y democrática. Este enfoque ha impulsado el concepto de los llamados “snacks de ejercicio”, también conocidos como VILPA (actividad física intermitente vigorosa, por sus siglas en inglés). Consiste en breves ráfagas de esfuerzo, como subir escaleras por un minuto varias veces al día. Estudios recientes sugieren que este modelo es más sostenible que los entrenamientos largos y contribuye eficazmente a reducir el sedentarismo. SUBE 5 TRAMOS DIARIOS A diferencia de los 10 mil pasos diarios, no existe una cifra universal recomendada de escalones. Sin embargo, investigaciones indican que subir más de cinco tramos al día —aproximadamente 50 escalones— puede disminuir de forma significativa el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Incorporar esta acción a la rutina diaria representa un cambio simple pero poderoso. Al tratarse de una actividad de bajo costo, adaptable y con beneficios comprobados, subir escaleras se consolida como una estrategia práctica para mejorar la salud física y mental en la vida cotidiana. (Texto y fotos: Tomados de debate.com.mx) Compartir Navegación de entradas “MenstruAI”, nueva compresa inteligente que checa tu salud Una técnica sencilla te ayuda a conciliar el sueño