Los talibanes emitieron una “orden” para prohibir que las mujeres afganas empleadas por la ONU trabajen en cualquier parte de Afganistán. En su represión permanente contra las mujeres, el gobierno afgano ya había anunciado una prohibición total para que las mujeres asistan a las universidades. La ONU denunció la decisión del gobierno afgano como “inaceptable y francamente inconcebible”. “Nos han dicho a través de diferentes canales que la prohibición se aplica a todo el país”, señaló el vocero del Secretario General de las Naciones Unidas, Stéphane Dujarric, citado por DW Español. INFAMIA La misión del organismo en Afganistán (Unama) “ha tenido conocimiento de una orden de las autoridades de facto que prohíbe trabajar a las empleadas nacionales de la ONU” y “nos dijeron por diferentes canales que la prohibición se aplica a todo el país”, indicó Dujarric. La Unama había asegurado horas antes que a las empleadas afganas, hasta ahora exoneradas de este tipo de medidas restrictivas, se les había impedido trabajar en la provincia de Nangarhar, en el este de Afganistán. “Para el secretario general (António Guterres) tal prohibición es inaceptable y francamente inconcebible”, agregó, al tiempo que denunció el deseo de “socavar las capacidades de las organizaciones humanitarias para ayudar a quienes más lo necesitan”. REPRESIÓN AL MÁXIMO El 24 de diciembre de 2022, el Ministerio de Economía afgano anunció que a las mil 260 ONG que operan en el país se les prohibía trabajar con mujeres afganas, debido a “graves quejas” sobre el incumplimiento del uso del hijab. Tras el anuncio, varias ONG suspendieron todas sus operaciones en protesta, lo que aumentó aún más la miseria de los 38 millones de ciudadanos de Afganistán. Después de días de discusiones, se acordó que las mujeres que trabajan en el sector de asistencia sanitaria estarían exentas del decreto. El personal de la ONU nunca se vio afectado por la prohibición. (Fotos: Tomadas de DW Español) Compartir
