Esta expresión se utiliza para señalar que algo ha empezado bien o que alguien nuevo que acaba de llegar lo ha hecho de manera correcta y sin problemas.Pero, originalmente la expresión viene del mundo de la iglesia, de los antiguos misales que indicaban que los sacerdotes debían acceder al altar dando el primer paso con el pie derecho.La respues del por qué debía hacerse así es que según los antiguos católicos al Paraíso solo se accedía por el camino de la derecha y entrando con ese pie.Originariamente la expresión proviene del mundo eclesiástico y más concretamente de los antiguos misales que indicaban que el sacerdote debía acceder al altar dando el primer paso con el pie derecho.Si algún religioso por despiste lo hacía dando el primer paso con el pie izquierdo y por casualidad cometía algún error durante la homilía o se quedaba en blanco echaba la culpa a no haber accedido con el pie correcto.Con el tiempo también se convirtió en sinónimo de mala suerte hacer muchas cosas con el pie cambiado (por ejemplo, levantarse con el pie izquierdo) siendo una de las supersticiones más conocidas.Compartir