Dos pequeños leoneses enfrentan una batalla diaria, pero eso no les impide cumplir sus sueños: ser policías y proteger a la gente.

Gracias al apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública de León y a la Fundación Dr. Sonrisas los pequeños Maité Alexandra y Dante Joseph se convirtieron policías portando uniformes, pasando lista y revista en la Delegación Poniente de la policía.

Ambos fueron reconocidos por su empeño y lucha contra enfermedades como glaucoma, en el caso de Maité de 7 años, y cáncer, en el de Dante, de 4 años.

CONVIVIO ESPECIAL

Posteriormente, recorrieron las instalaciones de la Policía Montada, donde conocieron el trabajo de este grupo especial y convivieron con los equinos.

“Me siento muy contenta y agradecida con la corporación y especialmente con la asociación del Dr. Sonrisas que hizo posible el sueño de mi hijo de ser policía por un día”, dijo María Guadalupe, madre de Dante.

Debido a la enfermedad que tiene mi hijo (cáncer) tiene muchas altas y bajas, es un sueño que me atrevo a decir que lo cumplió”, añadió.

“Él dice que de grande quiere ser policía, entonces si no lo puede ser de grande de chiquito tuvo ese sueño”, relató María Guadalupe.

DOS SUEÑOS

Maité fue diagnosticada desde muy pequeña con un soplo en el corazón que, de acuerdo con los médicos, ya superó, aunque le fue diagnosticado un padecimiento de glaucoma.

Pero esto no impidió que cumpliera dos sueños: ser policía por un día y montar a caballo.

Es el sueño de mi niña, que ella quiere ser de grande policía, ahorita pues doblemente emocionada porque otro de sus sueños era conocer y subirse a un caballo”, contó Mayela de Jesús, madre de Maité.

Yareli Pacheco y Chesto Padilla, voluntarias de Dr. Sonrisas, también valoraron la sensibilidad y apoyo de la policía de León para apoyar a la niñez.

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